Las investigación por el homicidio del senador Miguel Uribe Turbay sigue arrojando datos reveladores. Esta vez, la Fiscalía General de la Nación confirmó la existencia de un plan orquestado por la organización encargada de planear y ejecutar el homicidio del precandidato, para asesinar a testigos clave y así desviar el rumbo de las indagaciones judiciales. El ente acusador expuso que la organización criminal denominada ‘Gancho Mosco’ tenía un grupo de WhatsApp llamado ‘Plata o Plomo’, mismo grupo de mensajería en el cual fue planeado el crimen, intentó contratar una persona de la zona con el objetivo de eliminar a quienes habían sido capturados por su participación en el magnicidio y que podían brindar información comprometedora. LEA TAMBIÉN La revelación se conoció en audiencia pública, en la cual la fiscal Elsa Reyes, entregó detalles de lo que calificó como un “grave intento de obstrucción a la justicia”.La intención no era solo amedrentar, sino borrar de manera definitiva las voces que podían señalarlo a él y a otros implicados como responsables de la planeación del atentado contra el senador, asesinado en un ataque armado que conmocionó al país.Barragan fue uno de los integrantes de un grupo de WhatsApp que se creó para el crimen del senador.  Foto:Fiscalía/iStockLos intentos de la organización criminal por eliminar toda evidencia del homicidio Otro aspecto que salió a la luz fue el intento sistemático de destruir evidencia digital. Según el material presentado por la Fiscalía, tras el homicidio del precandidato Miguel Uribe, se detectó que los integrantes de la red criminal comenzaron a borrar mensajes y archivos de sus celulares, especialmente del grupo llamado ‘Plata o Plomo’, utilizado para coordinar acciones delictivas.Los investigadores pudieron recuperar parte de esta información mediante herramientas forenses, y en esos mensajes se evidenciaría la participación de alias Harold en la coordinación tanto del atentado como de las acciones posteriores para encubrirlo, pues fue él quién contrató al joven sicario. La fiscal Elsa Reyes explicó que la eliminación de conversaciones, fotografías y registros buscaba impedir que los organismos judiciales tuvieran pruebas sólidas de los vínculos entre los detenidos y los autores intelectuales. Esta conducta, sumada al plan para atentar contra testigos, mostró lo que el ente acusador describió como una estrategia de “doble encubrimiento”: borrar los rastros digitales y eliminar físicamente a quienes pudieran hablar.  LEA TAMBIÉN “Parte de la información contenida en su celular fue borrada por alias Harold”, señaló la funcionaria judicial, al detallar que, aunque el dispositivo fue entregado para recuperación de datos, gran parte debió ser restaurada mediante técnicas forenses porque los implicados “comenzaron a borrar todas las informaciones después de cometido el hecho”.La fiscal relató que los integrantes de la banda criminal luego fueron a un establecimiento a consumir licor y estupefacientes.En ese lugar destruyen un celular: le sacan la tarjeta SIM y lo venden para evitar alguna evidencia de efectivamente que hayan participado en esa comisión de este hechoeLSA REYESFiscal encargada del caso Miguel Uribe. Agregó que la investigación también estableció que todos los teléfonos utilizados ese día fueron desconectados al día siguiente, lo que confirmaría la intención de desaparecer rastros.”De acuerdo con la información que se ha solicitado a través de búsqueda selectiva en base de datos, se ha establecido que todos esos teléfonos que estuvieron presentes en ese lugar, al siguiente día fueron eliminados, fueron desconectados para no dejar rastro de esa información”. La fiscal reveló un punto especialmente delicado: “La Sección de Análisis Criminal de la Fiscalía emitió en julio una alerta temprana de riesgo, en la que se advertía que los implicados presuntamente estarían contratando a una persona de la zona para asesinar a quienes se encontraban capturados, precisamente para que no suministraran información”.Alias Harold, capturado por magnicidios Miguel Uribe. Foto:Suministrada por autoridadesEn las conversaciones recuperadas del celular se habla de que tienen que ocultarse, de que están calientes por lo del atentado. Eso muestra que existía un plan para desaparecerse y evadir a las autoridadeselsa reyesFiscal encargada del caso Miguel Uribe. Harold Barragán Ovalle, el séptimo capturado en atentado a Miguel Uribe. Foto:Archivo particularAlias Harold ha sido señalado como uno de los principales coordinadores de la banda, que según la Fiscalía, estaba al servicio de grupos armados ilegales y que se habría especializado en ejecutar atentados de alto impacto. La participación de menores de edad en estas operaciones fue otro de los elementos que indignó a la opinión pública, pues se confirmó que el adolescente que fue utilizado como sicario en el crimen de Miguel Uribe tenía 15 años. Cargos imputados Por estos hechos, la Fiscalía imputó a Barragán Ovalle delitos de homicidio agravado, concierto para delinquir, porte ilegal de armas, uso de menores en la comisión de delitos y amenazas contra testigos. En la audiencia se destacó que la intención de silenciar a los declarantes constituye una de las formas más graves de obstrucción a la justicia, pues atenta directamente contra el esclarecimiento de la verdad.REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS 

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