Finalmente no hubo ‘foto finish’ en la elección del nuevo magistrado de la Corte Constitucional: el exdefensor del Pueblo Carlos Camargo logró 62 de los 103 votos en la plenaria del Senado, a pesar de la abierta campaña en su contra del gobierno del presidente Gustavo Petro.La magistrada del Tribunal de Buga Patricia Balanta, quien terminó casi de carambola con el respaldo del oficialismo, logró el voto de 41 senadores. Con ese resultado, el Ejecutivo se anotó una nueva derrota en la Cámara Alta del Congreso, la misma que en mayo pasado hundió la polémica consulta popular con la que el Gobierno pretendía llevar a los colombianos a las urnas en pleno año preelectoral. Además, ve minimizada su influencia en la Corte Constitucional, el órgano de cierre de las discusiones de mayor envergadura para el país.Los ternados sentados en el recinto del Senado. Foto:Milton Díaz / EL TIEMPODespués de una accidentada sesión que se prolongó por más de seis horas y a la que no se les permitió entrada ni a los ministros ni a sus asesores, los votos de la oposición y de facciones mayoritarias del liberalismo, ‘la U’ y los verdes terminaron inclinando la balanza en favor de Camargo.“Hoy, más que nunca, sé lo que está en juego: es la confianza de los ciudadanos en sus instituciones y la certeza de que la justicia se ejerce no en beneficio de unos pocos, sino en nombre de todo el pueblo colombiano”, dijo Camargo durante su juramento ante el Congreso. Así mismo, garantizó que su “primera obligación será con la Carta Política que nos rige”.Dos días antes de la votación en el Senado, el presidente Gustavo Petro (a quien la decisión sorprende en su viaje a Japón) dejó clara la oposición a la candidatura de Camargo: “La elección del la nueva magistrada o magistrado, definirá todo el cuadro de alianzas en el Congreso de la República”, dijo en su cuenta de ‘X’. Según él, en esa elección sus aliados no podían “ceder a quienes han apoyado el fascismo”. Anoche crecían las versiones sobre la salida de tres ministros que eran consideradas fichas de los partidos que terminaron jugándose por Camargo (ver notas anexas).En la Corte Constitucional, a la que el nuevo magistrado debería integrarse máximo en dos semanas, se discuten varios temas decisivos para el gobierno Petro. La reforma pensional, la demanda contra el ‘decretazo’, con el que el Ejecutivo pretendió saltarse el camino constitucional para convocar a la consulta popular, y la creación de la polémica zona binacional con Venezuela están en la agenda a corto plazo.Carlos Camargo durante su intervención ante el Senado. Foto:John Pérez. EL TIEMPOAdemás, en momentos en los que varios alfiles del presidente Gustavo Petro siguen agitando la bandera de una reelección –que no es posible bajo las actuales reglas–, la Corte terminaría, como ocurrió en el gobierno de Álvaro Uribe, teniendo la palabra final.Con la llegada de Carlos Camargo a la Corte se refuerza claramente un sector que ha votado en contra de iniciativas del interés del Gobierno. En él aparecen el actual presidente del tribunal, Jorge Enrique Ibáñez, y las magistradas Paola Andrea Meneses y Lina María Escobar. Camargo reemplaza a José Fernando Reyes, a quien también se le incluía en este bloque.En ese tribunal, el Ejecutivo cuenta claramente con Vladimir Fernández, quien fue secretario jurídico de Palacio, con el exabogado de Petro, el magistrado Héctor Carvajal, y con Juan Carlos Cortés. Ocasionalmente los magistrados Miguel Polo y Natalia Ángel han acompañado posiciones favorables al Gobierno, si bien fuentes cercanas a sus despachos sostienen que no están casados con una posición y que sus votos se han ceñido a consideraciones netamente jurídicas.Polo Rosero, por ejemplo, fue ponente de la sentencia C-539 de 2023, que tumbó el Decreto Legislativo 1277 del 31 de julio de 2023, con el que se adoptaron medidas en materia ambiental y desarrollo sostenible en el marco de la declaratoria del Estado de Emergencia Económica, Social y Ecológica en La Guajira.Ángel, por su parte, votó a favor de eliminar el apartado de la Ley 2277 de 2022 —la reforma tributaria— que gravaba a petroleras y carboneros, así como del fallo que obligó al Senado a conciliar de nuevo el Plan Nacional de Desarrollo.Por otro lado, según fuentes dentro de la Corte Constitucional, el magistrado Héctor Carvajal se ha ido distanciando del presidente Petro, quien lo ternó, aunque aún no se ha pronunciado sobre temas de fondo.En la parte política, el Gobierno ajusta una nueva derrota en el Senado en momentos en los que tiene en el Congreso al menos tres iniciativas que le son fundamentales. Por un lado, se discute en las comisiones económicas el Presupuesto General de la Nación para el 2026 y, amarrado a él, la polémica ley de financiamiento, la reforma tributaria más alta de la historia con la que el Ejecutivo pretende recaudar más de 26 billones de pesos en un momento en el que ya despegaron las campañas del 2026.Senado escoge nuevo magistrado de la Corte Constitucional Foto:El año pasado, las comisiones tercera y cuarta del Senado encabezaron el inédito hundimiento del presupuesto. El resultado de este miércoles confirma que pese a todos los movimiento del ministro de la Política, Armando Benedetti, el Senado sigue siendo independiente del Gobierno, a diferencia de la Cámara de Representantes.Sara Valentina Quevedo DelgadoRedacción Justicia

Shares: