El colegio Francoise Dolto, donde el 29 de abril 8 niñas y niños estudiantes se quemaron supuestamente cuando su profesor intentaba prender una fogata durante el festejo del Día de la niña y el niño, operaba desde 2024 en la clandestinidad, en un domicilio no autorizado, diferente del declarado y sin clave oficial, informaron las autoridades educativas de Oaxaca.Durante la conferencia de prensa del gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, el titular del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), Emilio Montero Pérez, dijo que directivos del colegio se presentaron en 2024 a solicitar la certificación de sus alumnos al encontrarse sin autorización para realizar actividades académicas; sin embargo, ese mismo año se ordenó la suspensión de la clave y la clausura del establecimiento por no cumplir los requisitos de funcionamiento.Montero Pérez dijo que en 2023 el IEEPO emitió un exhorto a todas las escuelas a regularizar su estatus académico, ordenando la suspensión de aquellas que se encontraran de forma irregular. Se cancelaron 79 claves de escuelas por irregularidades.“Estamos trabajando en coordinación con la fiscalía, y dispuestos a brindar toda la información necesaria para esclarecer este lamentable hecho, e identificar y sancionar a los responsables. Por instrucción del gobernador, iniciaremos una profunda investigación para revisar las condiciones en que se encuentran las escuelas privadas del estado”, dijo el funcionario.Por su parte, el fiscal oaxaqueño, Bernardo Rodríguez Alamilla, informó que hay 6 denuncias por el delito de lesiones y más de 50 pruebas periciales.La menor que resultó más afectada fue trasladada a un hospital especializado en quemaduras en Houston en los Estados Unidos. Suman 8 niños y niñas con quemaduras de segundo y tercer grado.No se ha reportado sobre personas detenidas por estos hechos. Las madres y padres de familia exigieron justicia, al afirmar que fue una negligencia lo ocurrido en esta celebración del Día de la niña y del niño.“Exigimos justicia para nuestras hijas e hijos, en ningún momento nos dijeron que iban a realizar una fogata, y lo peor, cuando ocurrió el incidente, nos llamaron dos horas después, le quitaron los celulares a nuestras hijas e hijos, y hasta la fecha no sabemos nada de la directora, ni su esposo ni nadie”.En las redes sociales se comparte la foto de Kasumi y un número de cuenta, donde sus familiares piden ayuda colectiva para poder atender los gastos que genere su recuperación médica.

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